La labor de ganchillo, también conocido como crochet, es una artesanía que sigue realizándose en la actualidad.

Para aquellos artesanos principiantes que se aventuran en el mundo de las labores de punto, el ganchillo se presenta como una de las técnicas de labor más fáciles y con menos recursos para elaborarla.

Leyenda del origen del ganchillo

Los orígenes del ganchillo o crochet son bastante inciertos y las personas que hecho uso de su imaginación para contar la proveniencia de esta artesanía.

Cuenta una leyenda alemana que en un pueblo lejano de Alemania hubo una mujer bastante hábil en lo que se refiere a la creación de labores: una maestra artesana.

Se dice que un día de nieve invernal, vio caer un copo de nieve al alféizar de su ventana. La mujer lo observó largo rato y, al quedar fascinada por su perfección, tomó hilo y una gruesa aguja curvada y trató de imitar su forma. De esta manera, se dice, nació la primera labor de ganchillo, un precioso encaje que una mujer había sabido robar a la naturaleza como secreto.

Ventajas del ganchillo

El trabajo de ganchillo o crochet posee muchas ventajas en comparación a otros oficios de labor.

En primer lugar, es mucho más fácil que el trabajo con agujas porque se basa en pocos puntos fundamentales y de simple trabajo y ejecución. A partir de ellos, nacen todos los demás.

En segundo lugar, es también un trabajo más cómodo y puede interrumpirse en cualquier momento del mismo, sin necesidad de tener un cuaderno de notas. Por otro lado, las creaciones de ganchillo crecen con bastante facilidad y rapidez.

El ganchillo, por otra parte, permite hacer cualquier clase de trabajo: prendas de ropa, objetos de decoración, encajes y puntillas para acabar elegantemente la ropa interior personal o de la casa.

Todo esto indica que el ganchillo es una muy buena labor para comenzar en el tejido y en el textil por parte de principiantes artesanos.

Utensilios de oficio del ganchillo

Todo el mundo sabe cómo es el ganchillo. Se trata de una varilla de metal o de plástico, generalmente, con un extremo en forma de gancho.

Prácticamente, el equipo necesario para hacer esta labor es solamente el ganchillo. Para que resulte funcional tienes que fijarte que debe tener un gancho bien delineado y ser resbaladizo. Actualmente, se venden todo tipo de ganchillos: de madera, de hueso, de metal y de plástico, éstos últimos los más comunes.

No obstante, hay que tener en cuenta que los ganchillos están numerados desde el 2 al 12, pero hasta el número 6 existen también los números medios. Entre el número 2 y el número 5 recomendamos que los utilices con los siguientes tipos de lanas.

  • Para lana delgada se preferible usar el ganchillo de número 2.
  • Para la lana cablé, el número 3.
  • El número 4 se utiliza para el hilo de lana sport y de la lana de cuatro cabos.
  • Es preferible utilizar el número 5 para la lana câblé sport y la lana de cinco cabos.

De todas maneras, como norma general, es preferible utilizar ganchillos más finos de lo que requeriría el grueso del hilo.

Los hilos

Como hemos ido adelantando, por otro lado, los materiales que se utiliza para fabricar a partir de la labor del ganchillo son la lana y el algodón.

De estos dos, hay numerosas variedades que puedes utilizar dependiendo del estilo de ropa, de la prenda que quieras fabricar y el tacto que quieras sentir. Así puedes elegir en tu mercería o tienda online de textil de confianza cuerda, rafia, felpilla, cáñamo y lino. Luego, si quieres dar a tus trabajos un toque más lujoso puede utilizar laminados de oro, plata o de colores brillantes.

Los hilos que se encuentran en los comercios responden a una gama infinita de calidades y de tipos de trabajos y elaboraciones. Los hay de fibras vegetales, animales y artificiales.

Nosotros te recomendamos que utilices hilos que sean sutiles y ligeramente retorcidos para los trabajos esponjosos y suaves; los que sean más retorcidos que sean para labores compactas y de duración larga, y, finalmente, los hilos ensortijados o hechos con pequeños nudos se usan para la ejecución de modelos más elegantes.

Coser con ganchillo

Sujetar el ganchillo

El ganchillo más famoso para empezar es el ganchillo alemán, definido simplemente como ganchillo.

Debes coger el ganchillo con la mano derecha, entre el pulgar y el índice, apoyando el pulgar sobre la parte plana del ganchillo.
Pasando sobre el índice de la mano izquierda, debes sujetar el hilo firmemente por medio del anular y el meñique, doblados hacia la palma de la mano.
Finalmente, a mediada que trabajes, tienes que sostener la labor entre el pulgar y el dedo índice de la mano izquierda.

Formar el primer punto

Este es el primer paso que hay que realizar con la labor del ganchillo.

En primer lugar, debes sujetar el extremo del hilo entre el pulgar y el índice de la mano izquierda, encerrándolo entre los otros tres dedos y tu palma.
Después, debes pasar el ganchillo bajo el hilo, descendiendo de arriba a abajo, paralelamente al índice. Posteriormente, se gira sobre sí mismo, alejándolo de ti la persona que hace la labor.
Finalmente, se coge de nuevo el hilo, se hace pasar por el lazo que hay sobre el ganchillo y se estira.

Punto de cadeneta

Este punto es la base de toda la labor del ganchillo. Sin este, no se puede hacer ganchillo propiamente dicho.

Una vez formado el primer punto, se mantiene el ganchillo en posición horizontal, se coge el hilo que sujeta la mano izquierda y se retira a través de la lazada sobre el ganchillo, sacando un nuevo punto. A esto se le llama hilo sobre el ganchillo.
El movimiento anterior se repite hasta obtener la longitud deseada.
Sobre esta cadeneta, denominada «de base», debes trabajar pasadas de ida y vuelta, siempre de derecha a izquierda.

Montaje en punto de cadeneta doble

Este montaje sirve para iniciar un trabajo de labor de ganchillo más resistente.

En primer lugar, debes hacer 2 puntos de cadeneta siguiendo el modelo que anteriormente te hemos expuesto.
En segundo lugar, debes clavar el ganchillo en el primer punto, pasas el hilo sobre el ganchillo y con éste se pasa a través de los dos puntos que hay en el ganchillo cerrando el punto.
Finalmente, debes repetir, el movimiento clavando el ganchillo en el hilo de la izquierda del punto que se acaba de hacer. Nunca debes volver la labor.